ANA MAIQUES, fundadora de Starlab y posteriormente fundadora y CEO de su spin-off, Neuroelectrics, es una mujer que ha sabido ver a tiempo que uno de los grandes focos de mercado de nuestro siglo gravitará en torno al Espacio y a la Neurociencia. Ana y su equipo tuvieron la valentía de comprar la empresa para la que trabajaban cuando ésta quebró, y juntos la sacaron de aquella situación crítica, formando Starlab. Según la propia Ana, las empresas necesitan fricción para innovar, la fricción de las mentes de un equipo brillante de científicos e ingenieros, orientada a la consecución de un objetivo claro: conseguir transformar la ciencia en soluciones útiles para sus clientes

¿Cómo empieza vuestra aventura en Starlab?
Originalmente, mi esposo y yo decidimos convertirnos en investigadores y empresarios después de que nuestra compañía se declarara en quiebra. Pero realmente porque vimos una gran brecha entre la ciencia y el mercado – nos dimos cuenta de que al llenarlo podíamos tener un impacto en la sociedad. Eso es algo en lo que siempre he creído: Siempre fui crítico con mi entorno y soñé con cómo cambiar las cosas. Siempre pensé en un mundo mejor y estaba decidido a influenciarlo.

¿Se aprende a caer y levantarse?
Por supuesto, a lo largo del camino cometimos muchos errores, y tuvimos muchos fracasos. Pero si se mantiene firme cuando hay una tormenta – se despierta mucho más fuerte. Aprendí de hacer y de errores. Tienes que ser capaz de pensar en tus pies, aprender rápido y cambiar de dirección si es necesario.

Eres una gran emprendedora. ¿Qué hace falta para innovar?
Para mí, un innovador es alguien que puede pensar de manera diferente – e implementar con éxito. Para innovar se necesita VEP: Visión (¿qué quiero cambiar?), Ejecución (porque una buena idea por sí sola no es suficiente) y Pasión-tienes que creer y amar lo que haces, si vas a superar todas las Dificultades y obstáculos que encuentres a lo largo del camino.

Empezaste como una startup. ¿Qué es una startup para ti?
Como Steve Blank lo expresa, una startup es una organización temporal que busca el mejor modelo de negocio. Y eso es lo que hemos hecho. Para mí, para ser un innovador superior, usted tiene que ser capaz de hacer la ciencia de vanguardia -, sino también llevarlo al mercado de manera excelente. Dominar las dos culturas de la ciencia y del negocio dentro de la misma audiencia no es justa sobre la calidad de ideas; Un modelo de negocio sólido y un plan de implementación también importan para obtenerlo del laboratorio al mercado. Estos requieren diferentes habilidades. Como dijo Thomas Edison: «el valor de una idea radica en su uso».

¿Qué tipo de ayudas tuvistes?
En nuestro caso el apoyo de la UE definitivamente ayudó – nuestra empresa no estaría aquí y no habría entregado al mercado sin el apoyo de la UE. Eso incluye nuestros exitosos dispositivos médicos, Starstim y Enobio, que originalmente provenían del FP6 de la UE y de los proyectos «Future and Emerging Technology».

Hacen falta mujeres en la ciencia. ¿Cómo se encuentran?
El  sistema educativo juega su parte. Tal como está, la ciencia y el emprendimiento se presentan como opuestos, ¡pero no deberían serlo! Debemos capacitar a los investigadores para que sean más orientados a los negocios; Y ayudar a futuros empresarios a saber más sobre la ciencia también. Usted puede empezar mostrando a los niños cómo la ciencia es emocionante, con ejemplos de trabajo en el campo – vamos a hacer ciencia tan conocida como el fútbol!

Existen todavía prejuicios para mujeres emprendedoras
Como mujer emprendedora, no siento que haya encontrado nunca prejuicios – no de la gente talentosa y educada con la que he trabajado. En todo caso, diría que me sentía más prejuiciado por venir de una empresa de tecnología de España que por ser una mujer. Pero admiro a las mujeres que lo han hecho: y piensan que traen una manera diferente de hacer las cosas. Creo que la riqueza viene de mezclar diversas capacidades – incluyendo a mujeres y hombres. Creo plenamente en el esfuerzo del equipo. Frente a la competencia global, necesitamos el máximo valor añadido y la innovación – ¡eso significa que necesitamos más mujeres involucradas!

Felicidades por tu premio. Mejor mujer emprendedora europea.
Realmente este premio no es para mí, sino para mi gran equipo y todo el trabajo que han hecho en los últimos 13 años. Pero si inspira a otras mujeres a innovar, ¡entonces genial! Mi consejo a las mujeres que piensan en tomar un camino similar es simple: ser coherente con sus metas personales y la creencia, asegúrese de que realmente creen que este es su camino hacia adelante. Recuerde que ser un empresario no es fácil – se necesita preparación y compromiso

¿Cómo veis el futuro?
Es un riesgo. Pero en mi caso, puedo ver que el riesgo valió la pena. Hemos demostrado que la ciencia puede tener un retorno económico directo, medido por ventas, productos y servicios en el mercado. Y estamos empezando a ver las tecnologías que pensamos y desarrollamos trabajando en entornos reales como los hospitales – en realidad ayudando a los pacientes. Ahora la aventura que elegimos tomar todo tiene sentido. Ahora sueño con más innovación y más internacionalización: ya hemos abierto una sucursal en los EE.UU. y debemos seguir creciendo nuestro maravilloso equipo. Dentro de diez años espero que seamos la referencia en cómo transformar la investigación en productos: con una serie de empresas exitosas de spin-off en todo el mundo. ¡Es un mundo que espera ser conquistado!

Tu tiempo de ocio …
No es todo el trabajo por supuesto – me encanta estar en la naturaleza con mis cuatro hijos y marido, especialmente senderismo o camping en los maravillosos Pirineos en España. Espero que mis hijos aprendan sobre todo a ser felices, a no fijar límites sobre lo que pueden hacer, ya seguir su pasión – sea lo que sea.

Muchisimas Gracias Ana!!

Desde «Nosaltres empresàries» te deseamos mucho éxito